Estrategias de intervención en TEA: Habilidades necesarias a tratar para prevenir el fracaso escolar y el absentismo - Módulo 3
3. ESTRATEGIAS DE REGULACIÓN EMOCIONAL
3.2. Ayudar a regularse emocionalmente
La autorregulación puede definirse de varias maneras. En el sentido más básico, implica el control de la conducta, las emociones y los pensamientos en la búsqueda de objetivos a largo plazo. Más concretamente, la autorregulación emocional se refiere a la capacidad de gestionar las emociones e impulsos perturbadores. En otras palabras, a pensar antes de actuar. También refleja la capacidad de animarse después de las decepciones y de actuar de forma coherente con los valores más profundos.
La autorregulación implica hacer una pausa entre un sentimiento y una acción: tomarse el tiempo necesario para reflexionar, hacer un plan, esperar pacientemente. Los niños suelen tener problemas con estos comportamientos, y los adultos también.
La autorregulación también es importante porque te permite actuar de acuerdo con tus valores profundos o tu conciencia social y expresarte adecuadamente. Si valoras los logros académicos, te permitirá estudiar en lugar de holgazanear antes de un examen. Si valoras la ayuda a los demás, te permitirá ayudar a un compañero de trabajo con un proyecto, incluso si tú mismo tienes un plazo de entrega ajustado.
Actividades o estrategias que se pueden llevar a cabo para ayudar a regularse emocionalmente:
Crear una tabla de niveles emocionales: crear una ayuda visual que represente los diferentes niveles de emociones que puede sentir un niño, permitiendo al alumno crear sus propias etiquetas para cada nivel.
Enseñar a los alumnos a asignar niveles emocionales a determinadas situaciones.
Hable de cuáles deben ser las reacciones apropiadas ante los diferentes escenarios.
Enseñar a los alumnos estrategias de afrontamiento y ser un modelo
Habilidades de atención plena: fomenta las técnicas básicas de atención plena: aprender a aceptar la vida tal y como es en el momento. Estas habilidades utilizan todos los sentidos para prestar atención y participar plenamente en el presente, se practican sin juzgar y se centran en lo que es necesario para tener éxito.
Habilidades de tolerancia a la angustia: reconocen los impulsos de hacer cosas inefectivas, como amenazar con el suicidio o autolesionarse o actuar impulsivamente. También se centra en las habilidades necesarias para afrontar situaciones estresantes, tolerar y sobrevivir a las crisis, y controlar conscientemente los impulsos problemáticos y reencuadrar los pensamientos.
Habilidades de eficacia interpersonal: herramientas para evaluar las necesidades de una relación; para establecer y mantener relaciones sanas; para mantener el respeto por uno mismo (por ejemplo, ser capaz de decir "no" de forma asertiva); y para aprender a afrontar las pérdidas inevitables y los conflictos interpersonales.
Habilidad para recorrer el camino del medio: aprende a ver otros lados de la historia, cómo negociar y comprometerse, y cómo validar a los demás.